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Paco Rabanne Lady Million Empire Eau de Parfum

¿Cómo se construye un imperio? Atrévete con todo, todo el tiempo. Y querer un destino, ahora mismo.

Details

¿Cómo se construye un imperio? Atrévete con todo, todo el tiempo. Y querer un destino, ahora mismo. Lady Million Empire, fragancia floral chipre para mujer. Flor de magnolia sobre adicción al coñac. Ultrabrillante. Deliciosamente descarada. La embriaguez del éxito.

Dicta las reglas. Y reina sin oposición. Chica poderosa. Se atreve con todo. Todo el tiempo. Y quiere un destino. Ahora mismo. No le importan las críticas. Diamantes: ella los machaca. Lady Million Empire Eau de Parfum. Una brillante flor de Magnolia sobre una adicción al coñac. Una fragancia deliciosamente descarada. La embriaguez del éxito...

Esta fragancia floral chypre contrasta un bouquet ultrafacético con aromas embriagadores de fruta, coñac y madera. Pétalos de magnolia y cristal para el frescor, azahar más carnal matizado con notas de cuero y albaricoque. Brillante indolencia... antes de saborear la opulencia. Perfume de pachulí con inflexiones de almizcle blanco y licor. Una sobredosis de ciruela mirabel confitada, infusionada con coñac Gold. Insolencia dorada. Altamente adictivo.

Un diamante atrevido. Y sabe cómo hacer una declaración. Las mujeres primero... Ultrabrillante. Ultrafemenino. Una declaración audaz.

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Composición

Notas de salida: Azahar - ciruela mirabel
Notas de corazón: Magnolia
Notas de fondo: Coñac - acorde de vainilla

Paco Rabanne

Creador audaz, Paco Rabane nos recuerda que el Arte no es sólo copiar. Y en lugar de repetir una y otra vez las mismas creaciones de Alta Costura o las mismas fragancias, ¡experimenta! Dejemos a un lado la moda y observemos más de cerca sus fragancias: cada una, ya sea para hombre o para mujer, tiene un universo olfativo muy específico, un frasco que refleja la intención sensorial que hay detrás y un mundo casi onírico en el que envolverlo todo. One Million", por ejemplo, no tiene nada en común con "Invictus". La primera es una esencia de riqueza, que juega con los códigos de la opulencia, deseosa de retratar la imagen de un rico triunfador, y por eso se desliza en un estuche con forma de lingote de oro (una primicia en este campo). La segunda, con su envoltorio en forma de trofeo, se basa en la idea del poder, la competición y el combate de gladiadores. Y este sentido de la puesta en escena y la estética se refleja en las gamas femeninas. En lugar de ofrecer frascos y fragancias similares, Paco Rabane se toma el tiempo necesario para diseñar sus líneas y experimentar con los aromas. Y el resultado es inconfundible: fragancias sistemáticamente únicas, dirigidas a personas concretas.